Para la semana que terminó el 8 de julio de 2022, la Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS) del Reino Unido registró 10,232 muertes, 432 de las cuales se registraron como relacionadas con el coronavirus de Wuhan (Covid-19). Esto es casi 1,000 muertes más de lo normal en comparación con los niveles anteriores al covid, una tendencia que se ha mantenido durante al menos las últimas 11 semanas.
El «exceso de muertes», como las llaman, ha sido notable desde que se introdujeron por primera vez las inyecciones de virus chinos. Muchos ahora creen que la causa «es el pinchazo» , razón por la cual ha habido llamados para terminar con la agenda de inoculaciones y refuerzos.
“Este no es solo un fenómeno del Reino Unido”, dijo el Dr. John Campbell, PhD, en un video del 6 de julio de 2022. “Este es un fenómeno internacional”.
El Dr. Campbell obtuvo su doctorado de la Universidad de Bolton en 2013, con énfasis en la enseñanza de biociencias en el contexto de la educación de enfermería nacional e internacional. Su canal de YouTube, que cuenta con unos 2,39 millones de suscriptores, contiene muchos videos sobre la gripe Fauci y las mentiras que se cuentan al respecto.
“Muchas más personas están muriendo de lo que esperaríamos en base a los cinco años anteriores”, dice. «¿Que esta pasando aqui? Esto es demasiado para ser un artefacto estadístico. Este es un efecto genuino”.
En España el gobierno está achacando el claro exceso de mortalidad a «golpes de calor», como si en España en verano no se hubieran alcanzado nunca temperaturas de 40 grados centígrados. Para el gobierno de Pedro Sánchez sería una consecuencia más del cambio climático y el calentamiento global, de esta forma esconde las estadísticas y le permite seguir con la Agenda 2030 y el desmantelamiento de todo el tejido energético español, desmontando las centrales térmicas mientras le achaca la subida de la luz a la guerra de Ucrania.
Las “vacunas” contra el covid son una forma de genocidio masivo
El Dr. Michael Yeadon, exvicepresidente de Pfizer, también ha presentado afirmaciones de que las inyecciones de virus chinos son, de hecho, responsables del fenómeno del exceso de muertes que ahora se observa en todo el mundo.
Antes de la Operación Warp Speed, las tasas de mortalidad eran en su mayoría estables y generalmente predecibles. Ahora, mueren más personas de lo habitual, y solo hay un culpable obvio: los pinchazos .
Incluso si excluye las muertes que se atribuyen al covid y no a los pinchazos, todavía hay un exceso de ellos que no puede explicarse por otra cosa que no sean los pinchazos, dice Campbell.
“Excluyendo esos datos, el exceso de tasa de mortalidad en 2022 para Inglaterra y Gales es del 16,6 % combinado, y del 18,2 % solo en Gales”, escriben Jennifer Margulis y Joe Wang para The Epoch Times .
Un niño, Ted Sanderson, de 14 años, murió repentinamente en su escuela, Woodham Academy, el 21 de junio. Sanderson recibió sus inyecciones de covid según lo recomendado por el gobierno, y ahora su vida ha terminado.
Ese mismo día, otra persona llamada Chris Houghton-Rai colapsó mientras trabajaba en un concesionario Toyota. Durante 90 minutos, los paramédicos intentaron reanimarlo pero no pudieron detener su repentina muerte.
Aproximadamente una semana después, un jugador de fútbol profesional retirado llamado Gary Pearson, que acababa de asumir un nuevo trabajo como gerente de un equipo de fútbol, colapsó en su casa. Dos semanas antes, Pearson se había sometido a una cirugía cardíaca y «se esperaba que se recuperara por completo».
Sin embargo, eso no sucedió, ya que Pearson, quien fue descrito por sus amigos como «en forma y saludable», murió sin razón aparente. Al igual que Houghton-Rai, los paramédicos intentaron revivir a Pearson pero fue en vano.
Si bien el estrés y el aislamiento inducidos por la plandemia también pueden haber jugado un papel en algunas de las muertes excesivas, lo que llevó a condiciones fatales como el cáncer que no se diagnosticaron ni se trataron, el elefante más grande en la habitación son las inyecciones.
Algunas muertes posteriores a la inyección son inmediatas, pero otras tardan semanas o incluso meses en desarrollarse. Todo depende de la capacidad inmunológica de una persona, así como de las condiciones preexistentes que puedan existir.
El neurólogo Dr. Tom Lowry, MD, un experto en conmoción cerebral y musculoesquelético con sede en San Antonio, dice que él y sus colegas también están viendo un aumento en el daño neurológico desde que se introdujeron las inyecciones, y los jóvenes son especialmente propensos a estas condiciones, él dice.
“Deberíamos estar haciendo autopsias a cada uno de estos jóvenes”, se cita a Lowry diciendo. “Si lo hiciéramos, sabríamos con certeza dentro de seis meses lo que realmente está sucediendo”.
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